Alpine es una marca poco conocida, pero ha sorprendido al mundo del automovilismo con el lanzamiento de su hiperdeportivo, el Alpine Alpenglow, un coche que promete revolucionarlo todo en el sector gracias a su motor V6 de inyección de hidrógeno.
Este motor no solo se alimenta con hidrógeno, sino que además usa una tecnología que podría llevarlo desde las pistas de carreras de Le Mans hasta las calles, en una versión homologada para circular.
La llegada del Alpenglow marca un logro. Un logro en la transición hacia vehículos sostenibles que, sin dejar de lado las emociones de conducción deportiva, buscan reducir al máximo la huella de carbono.
Características innovadoras del motor V6 de hidrógeno del Alpine Alpenglow y su potencial en competiciones
El Alpine Alpenglow no es solo otro prototipo más que exponer; es un avance técnico que se ha convertido en el centro de atención en competiciones y exhibiciones de prestigio.
Con una potencia de 740 CV, su motor V6 biturbo alimentado por hidrógeno utiliza un diseño específico para manejar el hidrógeno de manera eficiente. Esta estructura no solo mejora el rendimiento y la seguridad, sino que permite que las emisiones se reduzcan a vapor de agua, eliminando el CO2 y minimizando otros contaminantes.
En el pasado, Toyota y otras marcas pioneras ya habían explorado la tecnología del hidrógeno. Sin embargo, Alpine ha llevado esta propuesta al siguiente nivel: busca abrirse camino en competiciones como las 24 Horas de Le Mans, que en 2028 admitirá una categoría especial para vehículos de hidrógeno.
Desafíos del hidrógeno en el sector automotriz y las innovaciones de Alpine para superarlos
El hidrógeno tiene grandes desafíos, sobre todo en cuanto a infraestructura de recarga y eficiencia energética. Hoy por hoy, el hidrógeno en el Alpine Alpenglow se almacena en forma gaseosa en tres depósitos presurizados a 700 bares, lo que permite una autonomía limitada comparada con los coches eléctricos convencionales.
Aun así, el diseño del motor ha sido optimizado para funcionar en condiciones extremas y garantizar un rendimiento potente y seguro.
Alpine también ha adoptado una tecnología de inyección de agua en la admisión del motor, una técnica que permite enfriar los gases y aumentar la presión de los turbos sin riesgo de detonación.
Diseño de alto rendimiento del Alpine Alpenglow: un guiño al futuro de los superdeportivos sostenibles
Más allá del motor, el diseño del Alpenglow ha sido elaborado para maximizar la seguridad y eficiencia del vehículo. Con una carrocería de fibra de carbono, inspirada en el estilo de los coches de carreras de la categoría LMP3 de Le Mans, el coche incorpora múltiples tomas de aire estratégicamente ubicadas. Estas tomas no solo mejoran la refrigeración del motor, sino que también permiten una ventilación óptima para la evacuación segura del hidrógeno.
Otra característica que destaca es el sistema de escape de inconel, un material resistente a altas temperaturas, que deja salir el vapor de agua en forma de un velo escarchado, dando un toque estético único al vehículo en movimiento. Además, el motor ha sido configurado en una disposición de 100 grados para aprovechar al máximo el espacio entre cilindros, donde se ubican componentes claves para la gestión del hidrógeno.
Alpine está abriendo una nueva perspectiva: la posibilidad de que los coches de hidrógeno no solo se limiten a la competencia, sino que también puedan formar parte de la oferta comercial para conductores particulares para cualquier persona.
Así es como Alpenglow es mas que un sueño, es un laboratorio “sobre ruedas” que podría marcar el rumbo hacia un futuro donde los coches de hidrógeno sean una realidad que todos podamos ver, oír y sentir.
Fuente: N. T.
Ecoportal