La pila de combustible puede utilizarse con una alternativa al hidrógeno. Propone 900 kWh de electricidad con un proceso imposible. El uso del hidrógeno está llegando a límites insospechados, tanto que ya es posible disfrutar del motor de hidrógeno y eléctrico a la vez. Sin embargo, esta propuesta podría dejarlo a un lado para disfrutar de otro combustible con muchas posibilidades.
La razón por la que echamos la vista al hidrógeno es porque las baterías de iones de litio presentan grandes limitaciones. Hace años que el H se presenta como una alternativa rentable y eficiente para producir la energía impulsora de vehículos eléctricos. Pese a que hay muchas expectativas sobre el H, es una tecnología que no carece de defectos. Por ejemplo, abarca exigentes condiciones de almacenamiento.
Los inconvenientes del hidrógeno llevan a la industria a pensar en otras alternativas y, aunque todavía es difícil encontrar una a la altura de la predominante gasolina y diésel, el proyecto del que te vamos a hablar ahora logrará expandir tu mente.
Esta pila de combustible viene del futuro y no utiliza hidrógeno
La startup neoyorquina Amogy ha presentado ante el mundo un sistema nuevo que deja de lado al hidrógeno, al menos de la manera en que lo hemos conocido hasta ahora. Ha mostrado un método que genera hidrógeno a bordo del vehículo a partir de amoniaco. El prototipo, una cabeza tractora Freightliner, ha tenido resultados satisfactorios en sus pruebas.
El mecanismo instalado en el Freightliner Cascadia 2018 dista mucho de su equipamiento original, con motor diésel. Usa un propulsor eléctrico y una celda de combustible de hidrógeno vinculados al tanque que almacena amoniaco y el convertidor que lo transforma.
Una vez que el depósito se carga de amoniaco, este pasa a un convertidor que lo descompone molecularmente. El descargo se completa en tan solo ocho minutos, tiempo similar al que tarda en repostar un vehículo tradicional.
Las partículas de hidrógeno se liberan del nitrógeno y llegan a la célula de combustible. Allí, se produce la quema y aparece la electricidad que sirve de combustible para el camión. A simple vista, introducir un paso más en el procedimiento podría verse como un atraso, pero la iniciativa de Amogy elimina los defectos ocasionados por presión (alta) y temperatura (baja) en su almacenaje. Esto es así porque el H se va utilizando según se genera.
Asimismo, el almacenamiento del amoniaco es más sencillo y segura porque puede llevarse a cabo a temperatura ambiente.
Llega el sustituto del hidrógeno: aparece una nueva pila de combustible
Otros de los beneficios de esta sustancia son la facilidad y sostenibilidad vistas en su producción, además de su eficiencia energética, que triplica la del hidrógeno y es cinco veces más alta que las actuales baterías de iones de litio.
Amogy todavía tiene un largo camino hasta llegar al día en que el amoniaco sea visto como la mejor alternativa a los combustibles fósiles. Por ahora, lo que sí ha demostrado es que alberga capacidad para transportar 900 kWh de electricidad neta. Solo el tiempo podrá determinar si realmente tiene un lugar preparado para él en la industria automotriz.
¿Qué es el amoniaco?
El amoniaco, presentado como una posible alternativa a los combustibles fósiles, se trata de un compuesto químico de nitrógeno e hidrógeno con la fórmula NH3. Su composición química contempla una parte de nitrógeno (N) y tres partes de hidrógeno (H3). Es un gas incoloro con un olor pungente y penetrante. Además, es posible encontrarlo en diferentes contextos: desde la atmósfera hasta el agua y el suelo.
En definitiva, la pila de combustible de amoniaco podría sacar de circulación la de hidrógeno a la que muchos ya se están acostumbrando. Sin embargo, todavía queda un largo tiempo para determinar si, efectivamente, es igual de viable que otras alternativas. ¿Quieres saber más sobre los alcances del amoniaco? Entonces no puedes perderte este artículo.
Fuente:
Redacción ECOticias – TN
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