La primavera es una clara invitación a disfrutar del tiempo libre, y si es en los exteriores de la casa, mucho mejor. Por eso las pérgolas se convierten en un recurso arquitectónico atractivo y funcional que siempre está en vigencia.
Pueden ser de madera, de estructura metálica semicubierta o cubierta con chapas traslúcidas, de policarbonato, un toldo, o bien rústicas; en cualquier caso, todas generan espacios de luces y sombras donde el sol es protagonista, proyectándose y otorgando diferentes efectos con el transcurso de las horas.
El que sigue es un repaso de Tendencias sobre las diferentes características y tipos que ofrece el mercado local y sus precios.
Cómo planificarla
Al pensar en construir una pérgola, lo primero que se debe tener en cuenta es la ubicación. Para eso, hay que analizar el trayecto del sol a lo largo del día. Recordemos siempre que es un sector que debe aprovechar el asoleamiento de la mejor manera.
Otro detalle es determinar el tipo: cerrada para usar todo el año (pérgola protegida), o bien abierta para que pase el agua de lluvia y/o sirva de apoyo a una enredadera, Santa Rita, trepadora o helechos. Luego, según las necesidades habrá que elegir su tamaño. Si sólo se quiere armar un rincón chill out (relax) no tiene que ser muy grande. En cambio, si lo que se busca es un espacio para comer, conviene apostar por un tamaño que quede cómodo para sumar el mobiliario correspondiente.
Por último, hay que decidirse por el material y el modelo que, entre otras cosas, debe continuar el estilo de la vivienda. Para espacios más cálidos, clásicos o con toques de rusticidad, siempre conviene la madera, mientras que las metálicas se acomodan mejor a las casas minimalistas.
De madera
Las pérgolas de madera proporcionan calidez y belleza a cualquier espacio. Permiten el paso de la luz natural del sol y protegen de la lluvia.
Las que son construidas con cubierta de chapas anti granizo dándo la sensación de un living o un comedor que no están expuestos del todo a la intemperie, y en los que se pueden colocar sillones, muebles de ratán, mesones, sillas y hasta parrilleros móviles”,
asegura Gonzalo Ferrer, arquitecto y titular de la empresa Techos Clapp Holl.
En el caso de las abiertas que dejan pasar el agua de lluvia se recomiendan maderas duras que resistan a la intemperie (quebracho colorado, anchico, virapita, marmelero).
Mientras que las protegidas por chapas plásticas, vidrio, o policarbonatos, construidas con maderas, semiblandas e incluso compensadas no se se alteran en la intemperie, dado que no quedan expuestas al agua de lluvia o el rocío, asegura el asesor de Clapp Holl.
“Actualmente, hay quienes prefieren algo más rústico con palos redondos de quebracho o eucalipto saligna, los más duros, para el caso de las pérgolas abiertas, protegidos con CCA”,
explica Erika Lóndero, titular de la firma Maderas Sucre.
Se trata de una imprimación de Cromo, cobre y arsénico, que confiere durabilidad a la madera y la protege de las condiciones meteorológicas adversas y del ataque de bacterias, hongos e insectos, detalla la especialista de Maderas Sucre
Finalmente, algunas pérgolas utilizan caña como cubierta que otorga un efecto interesante a partir de la filtración parcial de la luz del sol.
Medidas
“Las columnas pueden ser macizas desde 4×4 pulgadas hasta 6×6, o en su defecto se pueden fabricar columnas tipo sándwich, que se logran uniendo dos tirantes de sección 2×6 y tacos intermedios”, explica Efraín Oviedo de Maderas Nativas.
El asesor aclara que para el uso de tirantes hay que tener en cuenta que habrán por lo menos dos vigas de apoyo que esas deberán ser, dependiendo del largo, de por lo menos 3 pulgadas (espesor) x 8 (ancho), hasta 3 o 4 x 12 pulgadas. Los tirantes pueden variar de medida, desde 2×6 a 3×8, o más dependiendo del diseño. Y hay modelos que también agregan varillas de listones de 1×2.
Especies
En cuanto a las especies se comercializan maderas duras como guayubira, rabo, grapia. Semi duras, como marmelero, laurel, eucalipto. Blandas como kiri y ahora también se estila usar el pino, impregnado con CCA.
En caña, bambú o picanilla que se venden en medidas estándar de 4 metros lineales por 3 o 4 centímetros de diámetro, o bien de 6 u 8.
De estructura metálica
También hay pérgolas de estructura metálica realizadas en caños de acero que admiten la posibilidad de ser abiertas, cubrirlas con toldos o bien con chapa perforada a modo de celosías.
Nuestra última propuesta comercial es un sistema estructural modular y autoportante con diseño y estética, construido con materiales de alta calidad, rápida instalación, amplia vida útil y mínimo mantenimiento”,
así describen los asesores de Modernia.
La estructura se monta en la vivienda sin necesidad de obra húmeda ni soldaduras, y con la principal ventaja de disfrutarla al instante, incluye piso deck de WPC lista para ambientar.
Cuenta con dos modelos (que fueron presentados en la reciente edición de la Expo Estilo Casa), uno con listones pergolados en su sección superior y otro con techo de chapa calada con tecnología láser, detallan desde Modernia.
Precios
Pérgola cubierta palo redondo, el metro cuadrado desde $ 6.600
Pérgola Modular Aero de Modernia, desde $ 949.000
Fuente:
Héctor Magnone
La Voz
