En su nuevo libro, “Apego y crianza”, Maritchu Seitún, especializada en crianza, e Inés Di Bártolo, especialista en teoría del apego, se preguntan en este libro de qué hablamos cuando hablamos de apego y explican los fundamentos de una teoría que profundiza en los vínculos y nos ayuda a pensar cómo desarrollar vínculo saludables.
En un ameno e interesante recorrido, el libro analiza qué es el vínculo de apego, cómo se constituye y a qué personas nos apegamos. A su vez, comparte pautas sobre cómo se pueden cambiar los patrones de apego, la relación con los límites, la importancia de la autoridad y también de la conexión; y nos proponen un modo de construir buenas razones por las que un niño o un adolescente acepten la guía de un adulto parado como tal.
“Criar a un hijo es una oportunidad para revisar nuestras relaciones primarias y encontrar nuestro camino personal de maternidad y paternidad sin repetir lo que hicieron con nosotros -o sin hacer lo opuesto-, sin pensar, ni guiándonos por lo que dictan la moda o el entorno”, subrayan las psicólogas en un libro que nos permite ir para atrás y para adelante en nuestra historia y pensarnos mejor.
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“Todos los padres anhelan que sus hijos construyan un vínculo seguro y confiado con ellos y que alcancen esa íntima seguridad de que hay un adulto sensible y conectado, capaz de entenderlos y listo para cuidarlos y calmar sus ansiedades y preocupaciones”, dicen.
La teoría del apego nos muestra el camino para generar en los niños esa confianza que les permitirá alejarse y aventurarse al mundo sabiendo que siempre nos encontrarán disponibles para recibirlos y ayudarlos en lo que necesiten
A lo largo del libro, Maritchu Seitún e Inés Di Bártolo analizan las características del apego, la manera en la que influye en la vida de un niño o un adolescente, y cuáles son los elementos que la construyen o que atentan contra ella.
También tratan temas de crianza, como la conexión afectiva, los límites y la apertura emocional, y nos invitan a revisar nuestros propios modelos de vínculo y a conectarnos con las experiencias de la infancia, que se hacen tan presentes en la relación con los hijos.
Imperdible. Un joyita para todas las edades. Muy recomendado.
Fuente: Buena Vibra
Buena Vibra